Orígenes y evolución de los títulos nobiliarios
Los títulos nobiliarios en España tienen su origen en la Edad Media, cuando los monarcas comenzaron a otorgar títulos y honores a los nobles que les habían apoyado en la lucha contra los musulmanes. Estos títulos incluían el de duque, marqués, conde, vizconde, barón y señor.
Con el paso del tiempo, los títulos nobiliarios se convirtieron en una forma de recompensar a los vasallos leales y de asegurar la lealtad a la Corona. Durante la Edad Moderna, los títulos nobiliarios se convirtieron en una parte integral del sistema político y social de España. Los nobles gozaban de privilegios y exenciones fiscales, y también tenían un papel importante en la administración de la justicia y en la defensa del país.
Durante el siglo XVIII, los títulos nobiliarios comenzaron a perder importancia política, pero siguieron siendo una parte integral de la sociedad española. Durante la Guerra de la Independencia y el reinado de Isabel II, se crearon muchos nuevos títulos nobiliarios, y algunos de los títulos existentes fueron elevados a un rango superior.
Tipos de títulos nobiliarios
En la actualidad, existen varios tipos de títulos nobiliarios en España, cada uno con su propia jerarquía y nivel de prestigio. Los títulos nobiliarios más altos son los Grandes de España, seguidos de los títulos de duque, marqués, conde, vizconde, barón y señor.

Un poco de historia sobre los títulos nobiliarios
Príncipe
El título de Príncipe es uno de los títulos nobiliarios más reconocidos en Europa, pero su significado varía según el país y la época en la que se otorga. En España, por ejemplo, este título está reservado exclusivamente para el heredero o heredera de la Corona, mientras que en otros países europeos existe como un título nobiliario más.
A continuación, explicaremos en detalle el significado del título de Príncipe en la nobleza española y su importancia en la historia de la monarquía.
- Principado de Asturias. Se creó en 1385 por el rey Juan I de Castilla para su hijo don Enrique III.
- Principado de Viana. Fue creado por el rey Carlos II el Noble, en favor de su nieto el infante don Carlos futuro heredero del reino de Navarra, hijo de doña Blanca de Navarra en el año 1423.
- Principado de Gerona. Fue creado por el rey Fernando I de Aragón, en el año 1411, para su hijo Alfonso V el Magnánimo.
En España, sólo ha habido dos excepciones:
- Príncipe de la Paz: Concedido por el rey Carlos IV en 1795, a su ministro Manuel Godoy, y que años más tarde la reina Isabel II suprimió en 1847.
- Príncipe de Vergara: Se concedió con carácter vitalicio por el rey Amadeo I, a Baldomero Espartero, duque de la Victoria, quien nunca usó el título.
A día de hoy, no existen ninguno estos dos títulos.
Duque
El término «dux» tiene su origen en la lengua latina y fue utilizado en la época del Bajo Imperio romano y posteriormente en el periodo romano-germánico tras la caída del Imperio Romano. Este término hacía referencia al gobernador de un gran territorio.
La importancia de este término en la historia de España radica en que Don Pelayo, el primer rey de la Reconquista, fue un príncipe godo y primo del último rey visigodo, Don Rodrigo. En el año 711, Don Pelayo era dux, es decir, gobernador de Cantabria, territorio que comprendía todo el noroeste de la Península.
Marqués
Un marqués es un título nobiliario que se encuentra en el escalafón aristocrático justo por debajo de un duque y por encima de un conde. Su origen se remonta a la época romana y romano-germánica, cuando el marqués era el gobernador y defensor de una parte de la frontera, conocida como “marcas”, que separaban el mundo romano del bárbaro. En este artículo, profundizaremos en la historia y origen de este título nobiliario.
El término marqués proviene del latín “marchio”, que significa “el que está al frente de la frontera”. Este término se refiere a la posición del marqués como el defensor de la frontera. El marqués era el encargado de mantener la paz y la seguridad en las “marcas” que separaban el mundo romano del bárbaro.
Con el tiempo, el término marqués evolucionó para referirse al gobernador de un territorio de tipo medio. Durante la Edad Media, los marqueses eran los encargados de mantener la seguridad y la defensa de su territorio. También tenían la tarea de recaudar impuestos y de administrar la justicia.
Conde
El término «conde» proviene del latín «comes», que significa «compañero». En la antigua Roma, «comes» se refería a un compañero cercano o un asistente del emperador. Con el tiempo, este término se extendió a los dignatarios que acompañaban al soberano en su corte. Durante la Edad Media, el «comes» se convirtió en un título nobiliario, designando a un gobernante de un pequeño territorio.
En la Edad Media, el título de «conde» se otorgaba a aquellos que gobernaban un condado o un territorio. El conde era el gobernador de ese territorio y era responsable de mantener la ley y el orden en su jurisdicción. Con el tiempo, el título de «conde» se extendió a otros territorios y se convirtió en un título hereditario.
En el siglo XIX, el título de «conde» se extendió a otros países de Europa, como España, Francia y Alemania. En estos países, el título se otorgaba a aquellos que habían demostrado lealtad y servicio a la corona.
A lo largo de la historia, el título de «conde» ha sido un símbolo de poder y prestigio. Los condes han sido importantes figuras políticas y culturales en sus respectivos países. Muchos de ellos han contribuido significativamente a la cultura y la literatura de sus países, como el conde de Montecristo, uno de los personajes más famosos de la literatura francesa.
Vizconde
El Vizconde era un título nobiliario que se otorgaba a una persona que tenía la responsabilidad de gobernar y administrar una parte del territorio de un Conde en su ausencia. Su nombre proviene del latín vicecomes, que significa «en lugar del Conde».
Por lo tanto, se convirtió en el representante del Conde y el encargado de velar por sus intereses y derechos en las zonas más alejadas de su territorio.
Barón
El término «Barón» tiene un origen germánico y proviene de la palabra «baro», que significa «hombre libre y guerrero». En los reinos germánico-romanizados de la Alta Edad Media, los hombres libres y guerreros más poderosos adoptaron este título para distinguirse de los demás y para mostrar su poder y riqueza.
Las baronías son consideradas los primeros y más antiguos títulos nobiliarios de la historia, anteriores incluso a todos los demás. En España y en el resto de Europa, las baronías existentes hoy en día son generalmente muy antiguas y se remontan a la Edad Media.
Señor
El título de Señor aparece como tal en el siglo VIII. En España, el título de Señor también tiene una larga historia. Los Señores españoles eran nobles de rango inferior a los Condes y Duques, pero aún así eran considerados de alta alcurnia. A menudo, los Señores eran propietarios de pequeñas tierras y castillos, pero también podían ser funcionarios públicos o militares destacados.
El origen de la Grandeza de España
La Grandeza de España, fue creada como un categoría superior dentro de la nobleza titulada, por el rey Carlos I de España, conocido como Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico en el año de 1520, año en el que fue coronado en Aquisgrán.
El motivo de crear esta categoría, fue por pura política. La idea principal de elevar esta categoría era la de jurar lealtad al Rey, y así poder utilizarla al servicio de la nación.

Doña Inés de Zúñiga – Condesa de Monterrey – Pintura de Juan Carreño de Miranda – Museo Lázaro Galdiano – Títulos Nobiliarios – Muy Noble
¿Qué significa a día de hoy tener un título nobiliario?
A día de hoy una persona puede ser noble de mérito, por haber sido condecorado con una alta condecoración del estado como puede ser la Orden de Isabel la Católica o la Orden de Carlos III, siendo un reconocimiento personal.
La nobleza titulada, son aquellos nobles que han sido recompensados con un título a lo largo de la historia, que va desde el título de Señor, hasta el Duque.
La mayoría de las personas, relacionan el tener un título nobiliario con la Edad Media, y nada más lejos de la realidad, ya que hay cantidad de científicos de prestigio o incluso a seleccionadores de fútbol.
Por lo tanto, tener un título nobiliario es poseer una alta distinción otorgada por la Corona en la que se le reconoce al beneficiario una alta posición, siendo una persona que debe de ser de reconocimiento por parte de la Corona y del Estado.
¿Qué representa tener un título nobiliario?
Tener un título nobiliario es un honor y también una responsabilidad. En muchos aspectos sociales, conlleva un sacrificio, ya que se ha de mantener la honra de todos aquellos que lo tuvieron antes que tú. así como el de el antepasado al que se lo dieron.
Se tiene la imagen de un noble, con una vida holgada, pero no es así. A día de hoy, todo el mundo se gana la vida igual que el resto de la gente.
Mucha gente puede que no lo entienda, pero cuando el Rey te da una distinción es para que la uses, no para que la guardes en un cajón.
El título realmente es una parte del apellido, el título realmente no te da ningún privilegio, ni te paga ningún sueldo, además por heredarlo, se paga un impuesto. ¿Entonces por que no va a formar parte de tu apellido?
Los títulos reales en España
Además de los títulos nobiliarios, también existen los títulos reales en España. Estos títulos se otorgan directamente por la Corona y solo se pueden obtener mediante laces de sangre con la familia real.
Entre los títulos reales más conocidos en España se encuentran el de Príncipe de Asturias, que se otorga al heredero al trono, y el de Infante, que se otorga a los hijos y nietos del rey. Otros títulos reales incluyen el de Duque de Lugo, el de Duquesa de Palma de Mallorca y el de Conde de Barcelona.
¿Cuántos títulos nobiliarios hay en España?
Grandezas de España
- Ducados: 149
- Marquesados: 141
- Condados: 102
- Vizcondados: 1
- Baronías: 2
- Señoríos: 7
- Grandezas personales: 7
Títulos del Reino
- Marquesados: 1369
- Condados: 946
- Vizcondados: 140
- Baronías:169
- Señoríos: 7
Títulos totales en vigor: 2824
¿Cómo se puede tener un título nobiliario en España?
Un título nobiliario llega por sangre, no se puede comprar ni vender, ni siquiera transmitir voluntariamente. No se pueden ceder más que por sangre.
Sucesión y Rehabilitación de Títulos Nobiliarios
Sucesión: Existen dos modos:
- Sistema Inglés: Las reglas de sucesión en el Reino Unido se basan en el principio de primogenitura masculina, lo que significa que el título pasa de padre a hijo mayor. En el caso de que el titular no tenga hijos varones, el título puede pasar a otro pariente cercano. La ley de la sucesión de 2013 permitió que el título pudiera pasar a la hija mayor del titular si no tenía hijos varones.
- El Sistema Español: En España, el sistema de sucesión de títulos nobiliarios es muy diferente al del Reino Unido. Mientras que en el Reino Unido, la sucesión es automática tras el fallecimiento del titular, en España, el pariente o familiar que tenga derecho a heredar el título debe solicitar la aprobación de Su Majestad el Rey.El procedimiento administrativo de sucesión es gestionado por el Ministerio de Justicia, y en él se requiere que el heredero demuestre su parentesco con el fallecido titular y su derecho a heredar el título. El Consejo de Estado y la Diputación de la Grandeza también participan en el proceso de manera consultiva.Para demostrar el parentesco, se requiere la presentación de documentos tales como partidas de nacimiento, matrimonio y defunción que demuestren la relación familiar con el titular fallecido. Estas partidas, también conocidas como «cadena» por los expertos en derecho nobiliario, constituyen los eslabones que unen al heredero con el título.El derecho a heredar puede ser otorgado mediante testamento del fallecido titular o por cualquier otro elemento notarial admitido por la normativa vigente.Una vez finalizado el procedimiento y concedida la Real Cédula, el sucesor y nuevo titular del título debe abonar los correspondientes derechos para convertirse en el nuevo poseedor del título nobiliario.
Rehabilitación: En Europa y en España existen numerosos títulos nobiliarios que actualmente no tienen titular, algunos de ellos desde hace muchos años. Esto conlleva a que, de acuerdo con la legislación de cada país, cualquier pariente descendiente o colateral del último titular tenga derecho a solicitar su «rehabilitación», para que se le reconozca el derecho a la «sucesión» del título a través del tiempo.
La rehabilitación de un título nobiliario sin titular es un proceso largo y complicado que requiere de una serie de requisitos y pruebas para que el peticionario pueda obtener su reconocimiento. En primer lugar, se debe demostrar la existencia del título, lo cual puede ser un reto si se trata de un título que se remonta a siglos atrás. En segundo lugar, el peticionario debe demostrar su parentesco con el último titular mediante una «cadena» genealógica. Y en tercer lugar, se deben cumplir las condiciones establecidas por la ley para ser reconocido como titular del título.
Es importante destacar que el proceso de rehabilitación puede ser costoso y largo, y no todos los peticionarios logran obtener su reconocimiento como titulares del título nobiliario. Además, se debe tener en cuenta que cada país tiene su propia legislación y procedimientos específicos para la rehabilitación de títulos nobiliarios.
La importancia de los títulos nobiliarios en la sociedad española
Aunque los títulos nobiliarios ya no tienen la misma importancia política que en siglos pasados, siguen siendo una parte integral de la cultura y la tradición españolas. Muchas de las familias más prominentes del país aún conservan sus títulos nobiliarios y siguen desempeñando un papel importante en la sociedad española.
Los títulos nobiliarios también son importantes para la economía española, ya que muchas familias nobles poseen grandes propiedades y empresas que generan empleo y riqueza en el país. Además, el turismo relacionado con los títulos nobiliarios es una importante fuente de ingresos para muchas regiones de España.
¿Qué institución representa en España a toda la nobleza?
Esa institución es la Diputación Permanente de la Grandeza de España y Títulos del Reino.
Su función es representar a todos la nobleza titulada, como son la Grandeza de España y los Títulos del Reino.
También es el órgano que lleva la comunicación entre la Casa Real y los Grandes y Títulos del Reino.
¿Donde conseguir más información sobre títulos nobiliarios?
Te recomiendo que visites la página web de la Real Asociación de Hidalgos de España.
Realizan publicaciones de una revista online, y también son los creadores de las famosas Ediciones Hidalguía. Además te ofrecen formación en Genealogía e Hidalguía, a través de la Escuela de Genealogía, Heráldica y Nobiliaria.
Preguntas frecuentes
¿Cómo se heredan los títulos nobiliarios en España?
Los títulos nobiliarios en España se heredan por la línea masculina. Esto significa que solo los hijos varones pueden heredar un título nobiliario, y el título se transmite automáticamente al primogénito en caso de fallecimiento del titular.
¿Cuáles son los derechos y privilegios asociados a los títulos nobiliarios en España?
En la actualidad, los títulos nobiliarios en España no otorgan ningún derecho político ni jurídico especial. Sin embargo, los titulares de títulos nobiliarios aún gozan de cierto prestigio y reconocimiento social, y tienen el derecho de utilizar ciertos símbolos y tratamientos en su correspondencia y documentación.
¿Puede un extranjero obtener un título nobiliario en España?
No, los títulos nobiliarios en España solo se pueden obtener por nacimiento o por concesión de la Corona, y solo pueden ser transmitidos por personas que ostenten la nacionalidad española.
Los títulos reales y nobiliarios de España tienen una larga y fascinante historia, y siguen siendo una parte importante de la cultura y la tradición españolas. Aunque su importancia política ha disminuido con el tiempo, los títulos nobiliarios siguen siendo una fuente de prestigio y reconocimiento social en la sociedad española. Además, muchas familias nobles siguen desempeñando un papel importante en la economía y la vida cultural de España.
Ahora ya sabes más sobre la aristocracia.